Autor: Juan José Morales.
Una de las tantas promesas incumplidas de Calderón fue ampliar el horario escolar hasta las cinco de la tarde. Con ello, dijo, se beneficiarían tanto las madres que trabajan —que así podrán estar tranquilas durante la jornada laboral mientras sus hijos permanecen bien atendidos en la escuela— como los propios alumnos, pues al tener más horas de clase aprenderán más y mejor.
Han pasado tres años desde que Calderón ofreció tal cosa y 27 meses desde que ocupó la silla presidencial, y esta es la hora en que ni siquiera se anuncia alguna medida preliminar para cumplirla. Y es que no puede hacerlo. Sin embargo, su promesa ha sido reciclada por el PRI y el Partido Socialdemócrata, quienes en su propaganda electoral ofrecen escuela de tiempo completo, con lo cual —al igual que Calderón— demuestran su profundo desconocimiento de la realidad del sistema educativo mexicano y de la educación en general.
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