miércoles, 17 de septiembre de 2008

TRITÓN

EL BLOG DE YOANI

Me permito transcribir completo el artículo de Yoani Sánchez (Premio Ortega y Gasset 2008 en la categoría de Periodismo Digital) publicado el 17 de septiembre de este año.
El pecado original
Agosto y septiembre han sido una prueba dura para las tan esperadas reformas económicas, que parecen haber naufragado antes de siquiera levar anclas. “Tienes que tener confianza en la gestión de Raúl Castro” me exhorta una amiga al ver mi persistente recelo. “Pronto se van a implementar nuevas medidas” me aseguró, la misma señora, hace casi tres meses. Ella pertenece al grupo de los que esperan que los gobernantes puedan solucionar nuestros actuales problemas –una buena parte de los cuales los han creado ellos mismos con sus prohibiciones absurdas–. Yo, soy del piquete de los escépticos.

La duda me viene de algo que es “el pecado original” del gobierno de Raúl: que no ha sido electo por el pueblo, sino que es fruto de una sucesión sanguínea y dinástica. No fue escogido teniendo –al menos– un contrincante y, para mí, un nombramiento sin alternativa no es una elección.

El actual Presidente no propuso un programa, no se comprometió ante sus electores y eso hace que no tenga que rendirnos cuenta. Las tan necesarias medidas pueden tardar un año o un quinquenio porque no le va en ello su puesto. Alcanzó, sin competidores, la tentadora manzana del poder. Ahora puede comérsela sin prisa, pues nuestros votos no han sido el camino que lo ha llevado a conseguirla.

MES DE LA PATRIA

Imagen prestada de Sacatrapos.

viernes, 12 de septiembre de 2008

TORNEO DE APERTURA 2008

América - San Luis
Sábado 13 de septiembre
17.00 horas

DESDE CUBA


Calma en el Atlántico
Autora: Yoani Sánchez.

El meteorólogo principal de la televisión cubana, José Rubiera, anunció que ninguna nueva tormenta tropical o huracán se ha formado en el océano Atlántico. El alivio recorrió los más de ciento once mil kilómetros cuadrados de esta Isla. Al menos por unos días, el corredor de ciclones en que nos hemos convertido se tomará una pausa. No se ha disipado, con esa noticia climatológica, la pesadumbre y el desasosiego que tenemos ante el futuro inmediato. A pesar del triunfalismo que muestran nuestros telediarios, donde se habla de un “huracán de recuperación”, los cubanos estamos muy preocupados.

Por una parte, se acaban de esfumar todas las ilusiones de quienes esperaban un repunte económico en los próximos meses. Nos estamos despidiendo incluso de algunos productos como el plátano, el mango, el aguacate, las viandas y los cítricos que demorarán años en retornar a sus –ya elevados– precios actuales. Después de cuatro días sin electricidad y sin suministro de agua, los vecinos de los 144 apartamentos de mi edificio aguardamos por un suministro gratuito de agua potable y la distribución subsidiada de comida elaborada. Algunos ya han gritado por los balcones su inconformidad, a la que yo respondí con un provocador “!Viva Raúl!”, que casi me cuesta un linchamiento.

Ni el mercado en pesos convertibles, con sus engordados precios, da abasto a la demanda de los habaneros desesperados. El huracán Ike ha puesto más en evidencia las profundas diferencias sociales entre los que pueden disponer de una reserva alimentaria, tablas y radio de baterías y aquellos que dependen exclusivamente de la gestión oficial. Los antecedentes de cómo se apaga con los meses la ayuda estatal a las víctimas de desastres naturales, hacen que las personas no quieran promesas, sino soluciones inmediatas. La voracidad por tomar ahora lo que mañana quizás ya no se oferte hizo que los habitantes de un pueblo de Pinar del Río se liarán a machetazos para alcanzar las 100 tejas de asbesto cemento repartidas desde un camión.

Falta humildad en quienes deberían hacer todo lo posible para dejar entrar la ayuda humanitaria a Cuba. Una medida muy bien recibida sería que la Aduana Nacional liberara de impuestos todos los kilogramos de medicinas, ropa y alimentos que los familiares emigrados quieran traer a la Isla. Sin embargo, en lugar de eso, los cubanos amanecimos en medio del ciclón con una subida del precio del combustible y de algunos productos de primera necesidad. Se rechazan ayudas sin contar con la opinión popular y se permiten inspecciones de unos a la par que se les niega a otros hacer lo mismo. La imagen de un militar venezolano llegado a Cuba para “hacer una inspección de los daños” –palabras textuales– contrasta con los remilgos para aceptar algo similar de países de la Unión Europea (con excepción de España y Bélgica) o de Estados Unidos.

Las preguntas del momento son: ¿Cuál es la prioridad del gobierno cubano: los principios políticos o el bienestar de los que han perdido todo? y ¿Qué prefiere el gobierno norteamericano: cumplir el requisito formal de la inspección, o que el auxilio llegue a los damnificados? Los ciudadanos no vamos a esperar a que ambos gobiernos se pongan de acuerdo. La diplomacia popular les puedes dar la sorpresa de actuar más rápido y con más eficiencia.

lunes, 8 de septiembre de 2008

CACHITA

Mi abuela escondía tu imagen en el forro del ajustador, mientras mi madre cargaba todavía con la máscara del ateísmo. Las niñas de la casa aprendimos a venerarte sin saber tu nombre, arrobadas ante el dorado esplendor de tu capa. Antes de saber cómo te decían en una religión u en otra, te llamamos simplemente: Cachita.

Eres el único punto en que los cubanos nos ponemos de acuerdo. Logras convocar alrededor tuyo lo mismo a quienes te rezaron en privado por no ir a la Iglesia en los años del furor antirreligioso y a quienes como yo, no sabemos si al persignarse hay que tocar primero el hombro izquierdo o el derecho.

Hoy deberíamos estar como otros años, comprando girasoles y paseando tu imagen por las calles más céntricas de la ciudad, pero el huracán Ike ha ensombrecido tu día. Los alrededores de la bahía de Nipe, donde encontraron tu imagen hace 396 años, están bajo los vientos y las lluvias. Una plegaria intensa surge de los hogares de toda la Isla: “líbranos de todo mal y cubre con tu manto protector nuestra tierra asolada”.

viernes, 5 de septiembre de 2008

LEGIONARIO DE CRISTO

Es probablemente uno de los sacerdotes más populares en la provincia de Limburgo, aunque por su modestia esto no lo admitiría nunca. Atrae a mucha gente a la Iglesia, sus sermones tienen un impacto especial, y antes de que termine la misa ya ha conseguido arrancar de todos alguna sonrisa. Es un hombre amable, atrevido en su expresiones, y de muy buen humor. Un sacerdote que ama a la gente y la vida. Un pastor muy especial.

VENTANAS ROTAS

La teoría de las Ventanas Rotas, elaborada por James Q. Wilson y George Kelling, se basa en la premisa de que el crimen es el resultado inevitable del desorden. Estos criminólogos encontraron que el crimen, en cualquier centro urbano, era mayor en las zonas donde prevalecía el descuido, la suciedad y el maltrato a los bienes públicos. Una ventana rota en un edificio, si no era reparada pronto, era el preludio para que todas las demás fueran pronto dañadas.